¿Sabías que…
De acuerdo con la leyenda maya, el colibrí es un ave muy especial, pues ellos aseguran que:
La leyenda cuenta que durante la creación de la tierra, los elementos, los animales, los árboles, etcétera… se encargaron de darles un don o una misión a cada uno de ellos.
Al terminar de obsequiar esos dones, los dioses mayas se percataron que faltaba un mensajero que pudiera llevar los pensamientos y buenos deseos entre los dos mundos (espiritual y terrenal).
Los dioses tomaron una piedra de jade y tallaron una flecha pequeña y al terminarla, le soplaron provocando que la flecha saliera volando.
En ése momento nació “x ts’unu’um” es decir, el colibrí . Las plumas de este singular animalito son tan especiales que los hombres de la antigüedad intentaron atraparlo para crear adornos con su plumaje.
Los dioses, al percatarse de las intensiones de los humanos dijeron “si alguien lo atrapa, será castigado”. Es por eso que nunca se ha visto un colibrí enjaulado.
La virtud que le dieron al colibrí es el de llevar y traer mensajes, se dice que si esta ave se cruza en tu camino, es porque alguien te está mandando buenos deseos y mucho amor (aunque también se cree que también trata de advertirte de algún mal).
“El colibrí lleva de aquí para allá los pensamientos de los hombres”.
Recuerda que cuando un colibrí revolotea alrededor de tu cabeza, no intentes tocarlo, mejor piensa en y desea algo hermoso desde lo más profundo de tu corazón y el se encargará a tus seres queridos.
El colibrí es el único pájaro que puede volar en reversa, la razón por la que puede quedarse como suspendido en el aire es debido a su aleteo es de 80 veces por segundo, el cual, parece más un zumbido.
En México, recibe varios nombres que van desde quindes, tucusito, chupamirtos, picaflores, chuparrosas, huichichiquis.
En lenguas indígenas se le conoce también como huitzilli en náhuatl, jun en totonaco o tzunún en huasteco.
En la antigüedad, los aztecas consideraban que los colibríes eran valientes guerreros, incluso pensaban que esta ave era inmortal, por lo que representaba al dios de la guerra Huitzilopochtli (traducido tiene variaciones: “Colibrí zurdo” “Colibrí del Sur” o “Parte izquierda del colibrí”).
En América Latina existen alrededor de 330 especies de colibríes, en México y Norteamérica se distribuyen 57 tipos, de los cuales, 13 son endémicas y desgraciadamente 18, se encuentran en alguna categoría de riesgo, como lo es Coqueta de Atoyac y el Colibrí tijereta mexicano.
Debido a que las plantas de las que se alimentan los colibríes se encuentran amenazadas, la población de esta ave se encuentra amenazada.
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